Ayer leí un artículo de Jeff Haden en el portal Inc.com que realmente me interesó por su contenido de calidad y de verdad, así como por la repercusión que ha alcanzado en las redes sociales: ¡más de 8.000 shares en Linkedin y casi 7.000 RT en menos de un día!

“9 creencias de la gente extraordinariamente exitosa” resuelve con sencillas claves qué aspectos diferencian a las personas que triunfan en los negocios de la inmensa mayoría. Todo depende de la predisposición y mentalidad con la que vivimos nuestro ámbito laboral.

El autor, comenta que ha encontrado estos rasgos observando a compañeros que conoce, los cuales, sin importar la industria o la profesión que ejercen, comparten las mismas perspectivas y creencias. Hecho que los convierten en hombres de éxito empresarial. Veamos cómo actuar, según estos dogmas:


1. El tiempo no es quien nos domina, somos nosotros quienes aprovechamos el tiempo

A menudo, determinamos plazos y parámetros que no tienen mucho sentido. Haden explica que si fijamos dos semanas de trabajo, acabamos ajustando nuestros esfuerzos a este periodo. Cuando en realidad, podríamos optimizar estos esfuerzos utilizando nuestro tiempo libre para hacer este proyecto más rápido y eficaz.

Seamos dueños de nuestra agenda. Las tareas sólo deben tomar el tiempo que requieren y somos nosotros quienes decidimos aprovechar el tiempo.

2. Las personas que nos rodean son las personas que elegimos

Si las personas con las que trabajamos nos hacen infelices no es culpa de ellos, sino nuestra. Fuimos nosotros los que las buscamos.

Debemos pensar antes de nada con qué tipo de gente queremos rodearnos laboralmente: compañeros, clientes, proveedores… Del mismo modo que escogemos bien los buenos amigos en el terreno personal. A continuación, debemos poner en práctica esto y atraer a dichas personas, es decir, gente optimista que quiera trabajar con gente optimista.

3. Todavía no hemos conseguido nada

No importa lo que hayamos hecho o logrado en el pasado, nunca es demasiado bueno como para creérnoslo. Cada día es un nuevo reto por el que apostar. Por lo que demos diariamente el valor que merece nuestra actividad sin ser arrogantes.

4. La experiencia es irrelevante. Los logros son todo

¡Gran verdad! Jeff Haden advierte que da igual que uno pueda haber estado 10 años en un negocio de diseño web si no ha podido demostrar que durante ese tiempo ha alcanzado grandes logros como programador. Lo que realmente importa son los resultados.

La gente exitosa no se describe a sí misma con adjetivos hiperbólicos como ‘apasionado’, ‘innovador’, ‘orientado’, etc.… debemos demostrar de manera humilde qué hemos hecho en nuestra trayectoria profesional.

5. Aprender de los fracasos y no culpar al resto

Las personas que se alejan del perfil exitoso cuando fracasan suelen decir que ‘la economía se ha estancado’, que ‘el mercado no está preparado’ o que sus ‘proveedores no podían mantener el ritmo’.

Reconozcamos nuestros errores sin acusar a los demás. La autocrítica nos ayudará a aprender de nuestros fallos y mejorar nuestra actividad.

6. Los voluntarios siempre ganan

Aquellos valientes que siempre están dispuestos a colaborar voluntariamente tienen muchas más probabilidades de tener éxito. Esta predisposición ayuda a aprender, impresionar, adquirir habilidades, construir nuevas relaciones… diferenciándonos del resto que no quiere pasar a la acción. Una reflexión que nos alienta a generar oportunidades de negocio.

7. Especialización equivale a ponernos en la piel del cliente

La persona que busca el triunfo profesional siempre cuenta con una predisposición a adelantarse a aquello que su cliente necesita. Se trata de ir un paso más allá. Cumplir con los deseos del cliente – siempre y cuando no vulneren la ética, sean inmorales o ilegales, es una garantía de construir un modelo de negocio extraordinario.

8. La gente que nos paga tiene el derecho de decirnos qué tenemos que hacer

Es posible alinear la voluntad de nuestros clientes con nuestras propuestas. Evidentemente, como remuneran nuestro servicio debemos ofrecer el proyecto que deseen pero también, nosotros como profesionales, debemos aconsejarles educadamente para mejorar el resultado que se les venda.

El artículo nos recomienda no quejarnos si vemos que aquello que nos piden no tiene mucho sentido, sencillamente hay que amoldarse y escucharse por ambas partes.

9. Ir más allá es ‘un lugar solitario’

Finalmente, Jeff Haden concluye estas características haciendo referencia a aquellas personas que saben explotar los mercados donde nadie quiere entrar. Él las defines como “extra milles”, aquellos terrenos que, a simple vista, se rechazan porque comportan hacer un esfuerzo adicional de verdad.

Trabajar en estos proyectos es estar en un entorno lleno de oportunidades. De modo que seamos rápidos en detectarlos si queremos perseguir el deseado éxito empresarial.

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