Por desgracia, gran parte de la población vive anclada en un día a día donde se palpa tensión y desmotivación, como consecuencia de la dura situación económica por la que estamos pasando. Un problema de tal envergadura no puede desaparecer con una única solución que sea muy grande para lapidar todos los efectos de la crisis que nos ha tocado vivir. Sin embargo, si nace de nosotros ese pequeño gesto de progresión y positivismo, la suma de todos nosotros ayudará considerablemente a dar el empujón que necesita nuestra sociedad para dejar de ver con incertidumbre el futuro a corto plazo y arrancar de nuevo ‘el motor’ (de la economía, de la ilusión en el futuro, del crecimiento personal…).
El pequeño gesto al que me estoy refiriendo cuenta con una ventaja: por muy mal que vaya la cosa, nadie nos lo puede arrebatar y sus resultados son muy beneficiosos para aquel que lo pone en práctica. Te sientes más fuerte y seguro y, como consecuencia, tienes más puertas abiertas tanto a nivel personal como profesional. La pregunta es, ¿cuánto tiempo dedicas al día en tu tiempo libre en autoformación relacionada con tus estudios o tu ámbito laboral?
Imaginemos que cada día inviertes una hora en informarte sobre las últimas novedades del sector para aplicarlas en tu carrera o bien, la aprovechas para una interesante lectura sobre mejora personal, liderazgo o cualquier otra disciplina que te sea útil para ponerla en práctica. Al cabo del año, habrás logrado más de 300 horas que, además de haber aprendido muchísimo, te diferenciarán de otra persona con tus mismos estudios y un currículum parecido.
Este detalle, al que no hay que olvidarse que requiere gran disciplina con uno mismo, hace que pongas tu también tu granito de arena en el sistema, mejorando como profesional, De 24 horas, sólo se requiere una para que, en el caso de ir a una entrevista de trabajo y tener sobre la mesa varios currículum semejantes, puedas destacar y conseguir ese merecido puesto. Demuestra que vives tu trabajo, disfrutas de él, y cada día tienes más curiosidad por aprender más y perfeccionarte como profesional. No se trata de competitividad, se trata de la voluntad de aprender. Si cada persona pone en práctica este ejercicio y se trabaja la cultura empresarial de admirar a los que te rodean y compartir el conocimiento, algo que ya he tratado en este blog, reactivaremos juntos la economía porque cada vez habrá más profesionales trabajando con sólidos conocimientos del sector y se abrirán más puertas laborales explorando nuevas vías de negocio.
Cuando reflexiono sobre este tema siempre me viene a la mente las sabias palabras de Brian Tracy cuando decía ‘One Hour Makes All the Difference’. Para mí, es uno de los mayores referentes en cuanto a coaching de crecimiento personal. Tracy siempre ha defendido el compromiso con el aprendizaje permanente, una de las cualidades que define los líderes y grandes triunfadores de cualquier sociedad. Esto se debe a que estas personas trabajan duro para desarrollar su faceta personal y profesional, por lo que los resultados que obtienen en ambas facetas son brillantes.
La famosa llave maestra de dedicar una hora al día a estudiar un temario de nuestro campo fue fruto de las reflexiones de Earl Nightingale, más conocido como el ‘Decano del desarrollo personal’. El mismo que aseguró que si cumplías con esta promesa en tres años serías de las personas más entendidas en tu sector, en cinco, toda una autoridad nacional y en siete, podrías ser una de las mejores personas del mundo en lo que haces.
Por lo tanto, leamos todo lo que podamos. Las directrices de estos dos sabios son aconsejables para construir poco a poco una sociedad cada vez más llena de personas que apuestan por la profesionalidad y el sólido crecimiento económico y personal. Hay infinitas posibilidades que no se tratan de ‘titulitis’ sino, una apuesta personal por aprender más: suscribirse a clubs de libros, construir nuestra propia biblioteca de libros importantes en nuestro campo, pedir a las personas que consideras de éxito que te rodean cuáles son sus mejores recomendaciones de libros y leerlos…. Una hora de lectura diaria equivale más o menos a un libro por semana, que se traduce en unos 50 libros por año. Si seguimos esta disciplina, en diez años habremos devorado 500 obras que nos habrán aportado infinita formación y experiencia.
A menudo se suele escuchar ‘no le llega ninguna oferta de trabajo’. Cambiemos de mentalidad: este nuevo mensaje nace en la persona y va hacía el sistema, no al revés. La situación es muy difícil, es una certeza. Pero ayudará el hecho de que seamos nosotros los que entremos en acción. Crezcamos hacia una misma dirección y demostraremos nuestra capacidad de autoaprendizaje.
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